Cada vez son más frecuentes los ataques cibernéticos, el alcance es mucho mayor así como su daño, por ello es muy importante que las organizaciones, incluidos puestos directivos como empleados hagan todo lo posible para proteger los datos de su empresa. Una forma que se suele pasar por alto a menudo para mantener segura la información confidencial es prestar especial atención a la seguridad de las contraseñas.
Las contraseñas son moneda valorada en la era digital y es necesario usar contraseñas seguras para evitar el acceso no autorizado. La capacidad de transferir datos de clientes, archivos de clientes, registros médicos, archivos de trabajadores, los registros financieros y otra información muy importante y sensible ha presentado un nuevo mundo de riesgos legales.
Por todo ello, ¿Las organizaciones hacen lo posible para protegerse y proteger su negocio?
Las contraseñas deben ser únicas e interesantes.
La tendencia a simplificar sus contraseñas y repetirlas las hace propensas a atacar. Si se quiere tener un sistema de seguridad, los primero de todo es que funcione, es nuestro mayor deseo. Las contraseñas efectivas son suficientemente largas (8 o más caracteres) y combinan letras mayúsculas y minúsculas junto con números y símbolos.
Es muy importante utilizar contraseñas largas
La longitud puede aumentar exponencialmente la seguridad de su contraseña. Una contraseña segura debe tener al menos ocho caracteres, siendo 12 a 14 un estándar recomendado. Es importante usar una combinación de caracteres alfanuméricos y símbolos, junto con las mayúsculas.
Otro dato importante es no repetir las contraseñas.
No hay que usar la misma contraseña para más de un sitio. Si lo hace, cuando se roba una contraseña, puede utilizarse para comprometer más de una cuenta. Hay que pensar en un sistema que tenga sentido, para que otros no puedan adivinar fácilmente, para variar sus contraseñas.
Proteger las contraseñas.
Si creemos que hay que escribir la contraseña, no hay que guardarla electronicamente. Si el ordenador es pirateado, entonces le otorgamos acceso criminal a todas las cuentas cuando tropezamos con el documento de «mis contraseñas». Es por ello que hay que almacenar las contraseñas escritas en una ubicación segura, si puede ser una caja de seguridad, mejor.
Emplear la autenticación de dos factores o de factores múltiples.
Agregar un paso adicional a las credenciales de inicio de sesión refuerza la protección. Puede ser una huella digital, un pin enviado al móvil o una pregunta de seguridad que hay que responder. Las credenciales robadas pueden volverse inútiles para un ladrón si tiene esta capa adicional de protección. Es importante verificar la configuración de la cuenta y agregar MFA si está disponible.
Evitar la función de inicio de sesión automático.
Puede ahorrar tiempo y frustración, pero la información de inicio de sesión automática y guardada, incluidas las contraseñas, puede hacer que sea más probable que la organización sea pirateada.
Mirar lo que se comparte en línea.
Dar al mundo una idea de nuestra vida personal en las redes sociales o en cualquier otro lugar puede hacer que las contraseñas y las respuestas a las preguntas de seguridad sean más fáciles de adivinar.
Cambiar las contraseñas.
Hay mucha conciencia porque se valoran mucho los cambios regulares de las contraseñas, de tal forma que ha evolucionado mucho. Hay que cambiar la contraseña si se va a fortalecer, pero cambiarla con demasiada frecuencia puede dar como resultado contraseñas más débiles o contraseñas repetidas si se agota la creatividad y paciencia. Por supuesto, si hay un evento que sugiere que la contraseña puede haber sido comprometida, por supuesto, hay que cambiarla cuanto antes.
Si necesita más información, puede ponerse en contacto con nosotros para lo que estime oportuno en nuestro teléfono 948183311 o en ticna@ticna.es.